Un hacker ha logrado hacerse con el control de este cinturón de castidad conectado y pide bitcoins a las víctimas para desbloquearlo
Muchas de las cosas malas que pueden pasar acaban ocurriendo, y más en asuntos de ciberseguridad. Es la historia reciente del Qiui Cellmate Chastity Cage , un cinturón de castidad conectado que se conecta a los smartphones por Bluetooth y WiFi, y que permite que la persona que se lo ponga no tenga acceso a sus genitales .