Estrategia de los navegadores GPS integrados
¿Cuántos coches de los que se venden o circulan tienen un navegador GPS integrado, de esos que vienen “de fábrica”? Muy pocos. Suelen ser en la mayoría de los casos un equipamiento opcional que implica un sobreprecio importante, y en el mejor de los casos vienen de serie en los niveles de acabado más altos, que también son más caros.